Lucrecia Elizabeth Jadán Sumba (39 años) llegó Estados Unidos a finales de 2021. Ese año, había salido de su natal Gualaceo, en Azuay, al igual que miles de migrantes ecuatorianos que aún salen del país y no han retornado.
La migrante ecuatoriana se estableció en Nueva Jersey. Limpiaba casas, fue niñera y finalmente, consiguió empleo en un salón de uñas. El 7 de enero de 2025 fue el último día que llegó a su trabajo. Al día siguiente tenía libre, por lo que sus compañeras no la vieron más.
Cuando el 9 de enero Lucrecia no llegó al trabajo, sus compañeras empezaron a preocuparse. La llamaron al teléfono y fueron a buscarla a su casa.
Al no dar con su paradero, sus compañeras de trabajo llamaron a más familiares, publicaron su foto en redes sociales y acudieron a la Policía. El esposo de ella dijo que no sabía sobre su paradero, según información publicada por sus familiares y amigos en la organización Gofundme.
El sábado 11 de enero, su cuerpo de la mujer ecuatoriana fue hallado en un basurero, pero en Pensilvania, otro estado de Estados Unidos, cercano a Nueva Jersey.
Esposo es sospechoso del crimen
La autopsia determinó que la mujer murió a causa de heridas con objetos punzantes, por lo que el caso se investiga como un homicidio y su esposo es sospechoso del crimen. El caso está bajo investigación de las autoridades de Pensilvania y de Nueva Jersey.
Colecta para repatriar su cuerpo
El sueño de Lucrecia era reunir a sus cuatro hijos en Estados Unidos. Con su esfuerzo, logró llevar a tres de ellos. Ahora, el objetivo de su familia es repatriar su cuerpo a Ecuador, en donde la esperan sus padres y un hijo de 19 años.
Por ello, sus allegados iniciaron una colecta en la organización Gofundme, para reunir fondos para pagar su funeral y la repatriación.
Fuente: Primicias